NOCHE TROPICAL EN PLENO FEBRERO. VAGUADA POLAR PARA ACABAR EL MES
Hoy ha sido uno de esos días que quedan en la memoria de los aficionados a la meteorología, aunque por desgracia ya nos vamos acostumbrando a estas anomalías.
En la mayoría de localidades a orillas del Cantábrico las temperaturas nocturnas no han bajado de 20ºC. Una noche tropical a 15 de febrero!.
Las máximas también han sido realmente altas fruto del flujo de componente sur que provocó una advección de aire africano.
Algunos registros máximos en las regiones cantábricas han sido los siguientes:
San Vicente de la Barquera: 27,6ºC
Llanes : 26,5ºC
Camargo (Santander): 26,3ºC
Loiu: 26,2ºC
Para rematar estas condiciones tan poco invernales hemos tenido lluvia de barro en amplias zonas.
Las próximas jornadas (a excepción de este viernes por el cuadrante nordeste y el domingo por el Cantábrico) también vendrán marcadas por temperaturas anormalmente altas bajo dominio anticiclónico casi general.
Pero el invierno aún no ha dicho la última palabra y estas condiciones previsiblemente cambiarán abruptamente entre el 22 y el 24, cuando probablemente nos afectará una vaguada polar que arrastrará bastante aire frío a todos los niveles.
El chorro polar tenderá a ondular, y como consecuencia de una primera onda, una dorsal anticiclónica ascenderá sobre las islas Azores hacia el día jueves 22 de febrero, alcanzándonos de lleno una vaguada el día viernes 23.
No será ni mucho menos una ola de frío, pero al menos volveremos a condiciones propias del invierno después de muchas jornadas con condiciones más propias de abril o mayo.
Cómo bien indicas al parecer a partir del próximo jueves tendremos nuevamente invierno. Veremos si la cota de nieve baja lo suficiente como para alcanzar sitios fuera de la montaña.
ResponderEliminarDeciros que comienza a ser llamativo como recogen los medios de divulgación información científica el debilitamiento de la AMOC, esta importantisima circulación de retorno de agua profunda del Atlántico, empieza a dar cambios de comportamiento por el aumento del agua dulce procedente del Polo, y por consiguiente cambios de densidad. Si esto pasa que todo indica que así será, sobre el continente europeo se hace probable conocer las consecuencias de una glaciación. Quizás seamos nosotros los que la veamos.
Los registros actuales de flujo de agua dulce hacia el Atlántico Norte no hacen indicar que dicho colapso de la circulación de vuelco meridional del Atlántico vaya a producirse en las inmediatas décadas. Una cosa es que se ralentice, y otra bien distinta hablar de colapso y de inicio de una glaciación que ni tú ni yo viviremos. Ojalá haya un reajuste de los patrones climáticos regionales en Europa Occidental y volvamos a tener inviernos como los de los 80's, no lo podemos descartar...porque al paso que vamos en invierno veremos más mosquitos africanos que avefrías europeas.
ResponderEliminarColega, mucho mejor así, no quiero ver hielo en la puerta de casa durante todo el año. Igualmente tendremos que aceptar que el flujo de agua dulce tendrá una gran progresión. Los registros nos dan sorpresas todos los años.
ResponderEliminar